Representantes de la organización participaron como comisión evaluadora para el ramo de Campañas Publicitarias.
‘‘Para nosotros como fundación es muy relevante poder fortalecer y ganar estos espacios en términos de un público que nos ayude en nuestras campañas y nos apoye en este fin que es cambiar la cultura vial de nuestro país’’, así lo comentaba el sociólogo Alejandro Corder, Director de Investigación de Fundación Emilia y quien presidiera el pasado viernes 14 de julio la comisión evaluadora de los estudiantes de 7mo semestre de Ingeniería en Marketing.
Y es que los meses como éstos, previos a las festividades, resultan clave para la fundación que desde 2014 se propuso como misión propiciar una cultura de responsabilidad social vial, para no volver a lamentar la pérdida de vidas a raíz de delitos de tránsito. Recordemos que la organización se originó por el accidente provocado por un conductor ebrio, resultando una bebé fallecida, Emilia Silva, quien le dio el nombre de la fundación creada por sus padres.
Compartiendo este objetivo, los estudiantes debieron planificar una campaña de concientización para jóvenes que bebieran alcohol y condujeran durante las festividades, en el marco del cierre semestral del ramo Campañas Publicitarias. Para el profesor, Sebastián Machefert, una de las formas más completas de aplicar los conocimientos adquiridos en el semestre es con la participación de un cliente real: ‘‘Creo que la mejor forma de poder aplicar esto es con un cliente real, es decir que ellos aporten sus conocimientos hacia algo más real. Es la única manera de que ellos puedan empezar a superarse y que no hagan los trabajaos ‘por sacarse un 7 solamente’, sino que para ellos mostrarse como profesionales y creo que se logró perfectamente, porque los chicos pusieron un empeño único en lo que hicieron’’.
Divididos en grupos y organizados en agencias de publicidad, los estudiantes formularon diferentes campañas creativas pensado en las fiestas de fin de año. De las 9 agencias que se presentaron, tres fueron las elegidas para presentar ante la Fundación Emilia, resultando ganadores ‘‘Agencia Triz’’.
Trabajar para una campaña de prevención ha sido un desafío muy importante y atractivo, ya que estratégicamente debíamos generar impacto entregando un mensaje de consciencia el cual despierte el sentido de cuidado en los conductores. Es por eso que quisimos no solo apuntar con el mensaje a los conductores, sino que, a la sociedad, amigos, a todos aquellos que influyen en el consumo de alcohol olvidando las consecuencias que existen, quisimos aportar con un llamado al cuidado propio y del otro, para logar disminuir cifras de accidentes en la sociedad’’, comentó José Calvuen, estudiante miembro de Agencia Triz.
En tanto, el segundo y tercer lugar lo obtuvo ‘‘Agencia Follow Me’’ y ‘‘Agencia Digital Trip’’, respectivamente, los que al igual que el grupo ganador se prepararon de la mejor forma para exponer demostrándose comprometidos con la causa. Como dijo el estudiante Hugo Opazo: ‘‘creo que fue enriquecedor para todos a nivel personal y a nivel académico también, porque pudimos ver las dos caras de cómo esto se entrelaza, fue una excelente experiencia como trabajo para mí y para el grupo’’. Asimismo, para María Villavicencio: ‘‘personalmente me gustó mucho hacer esta campaña, porque era primera vez que nos tocaba hacer un tema tan delicado, pero tan importante para la sociedad, en que además íbamos a aprender mucho mediante la realización de la misma’’, dijo la estudiante.
Los representantes de la Fundación Emilia quedaron conformes y contentos por el trabajo de los estudiantes al darse cuenta, además, de que ellos pudieron entender el sentido de su objetivo. ‘‘Es muy reconfortante saber que hay esfuerzo, que hay dedicación, que hay compromiso con estas labores y que no es simplemente como uno puede pensar, que las campañas están asociadas a un bien económico, sino que a un bien social y que eso nutre nuestra alma y nos pone felices’’, apreció Alejandro Corder.
La decisión final fue muy complicada de tomar, tanto para el profesor como para los evaluadores invitados, pero, finalmente, ganó la opción más integral. ‘‘El cliente se fue feliz y dijo que todas las propuestas eran totalmente realizables, pero la que ganó se acerca totalmente a lo que ellos necesitan y se va a conversar con la fundación para ver si se puede llevar a cabo, así que esto es una motivación para ellos, para la carrera y para la Escuela en sí’’, finalizó el docente Sebastián Machefert.